Israel, Tierra Santa y turística, Siguiendo los pasos de Jesús
Uno de los eventos más emocionantes para la humanidad ha sido peregrinar a Tierra Santa. Para los cristianos del mundo entero, Israel es la tierra donde nació y fue criado Jesús de Nazaret, donde realizó sus milagros, fue crucificado y donde resucitó de entre los muertos para redimir al mundo.
Peregrinar por esta tierra es adentrarse en el pasado caminando a la sombra del Creador del universo, mientras se oye el eco vibrante del Maestro de la Galilea que resuena en todos los rincones de sus maravillosos paisajes.
Caminar tras las huellas de los patriarcas, los jueces, los profetas y los apóstoles, visitar los lugares donde Jesucristo ejerció su ministerio en la tierra en una vivencia llena de inspiración y calidez que permitirá a vuestros peregrinos obtener una nueva perspectiva de la Biblia y crear un quinto Evangelio personal de cada uno.
En Jerusalen todos los nombres cobran vida y se puede ver y visitar cada uno de ellos: el Monte de los Olivos, los Jardines y la Gruta de Getsemaní, los lugares de varios acontecimientos y milagros... las mismas colinas y senderos que siempre han formado parte integral del paisaje de la ciudad.
Las 14 Estaciones marcan el Camino del Viacrucis, desde el lugar del juicio a los puntos de la crucifixión y el entierro. En la Estación II está el Monasterio de la Flagelación, el Convento de las Hermanas de Sión en el Arco del Ecce Homo. Hay pequeñas capillas en otras estaciones, pero la mayor parte de ellas sólo abren los viernes por la tarde.
La culminación de este viaje es el Calvario y el lugar mismo de la tumba -la Iglesia del Santo Sepulcro- que contiene las cinco últimas Estaciones. La grandeza y significado de este lugar van más allá de las palabras, porque es la mayor motivación para que un cristiano emprenda su peregrinación.
Pocas ciudades en el mundo emanan tanta espiritualidad como Jerusalén. No en vano la ciudad israelí es el centro religioso mundial para las tres religiones monoteístas: judaísmo, cristianismo e islamismo. Fundada por el rey David hace más de 3000 años, en Jerusalén vivió y murió Jesucristo.
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